Amelie (título original en francés: «Le Fabuleux Destin d’Amélie Poulain») es una película francesa de comedia romántica dirigida por Jean-Pierre Jeunet y estrenada en 2001.
La película gira en torno a Amélie Poulain, una joven parisina que decide cambiar la vida de las personas que la rodean para bien, mientras lucha con su propia soledad y aislamiento.
La historia comienza con una descripción de la infancia de Amélie, marcada por la sobreprotección de sus padres, lo que la lleva a desarrollar una imaginación muy activa. Ya adulta, trabaja como camarera en un café de Montmartre. Su vida da un giro cuando descubre una caja de recuerdos escondida por un niño décadas atrás en su apartamento. Decidida a encontrar al dueño y devolverle la caja, Amélie se embarca en una serie de buenas acciones anónimas hacia las personas que la rodean.
Personajes película Amelie
Principales
Amélie Poulain (interpretada por Audrey Tautou)
Es la protagonista de la historia. Amélie es una joven introvertida y soñadora que trabaja como camarera en París. Después de encontrar una caja de recuerdos escondida en su apartamento, decide dedicar su vida a hacer el bien alrededor de ella de manera anónima. A través de su viaje, descubre el amor propio y la valentía para abrir su corazón a los demás.
Nino Quincampoix (interpretado por Mathieu Kassovitz)
Nino es el interés amoroso de Amélie. Trabaja en una tienda de sexo y tiene el pasatiempo de coleccionar fotos desechadas de fotomatones. Es tan peculiar y encantador como Amélie, y su búsqueda de las pequeñas alegrías de la vida lo lleva directamente hacia ella.
Raymond Dufayel (interpretado por Serge Merlin)
También conocido como el «hombre de cristal», Raymond es un vecino de Amélie que sufre de una enfermedad ósea que lo mantiene confinado en su apartamento. Es pintor y juega un papel crucial en el desarrollo personal de Amélie, alentándola a seguir sus sentimientos por Nino.
Raphaël Poulain (interpretado por Rufus)
Es el padre de Amélie, un hombre viudo y bastante distante emocionalmente. Su vida cambia cuando Amélie, en un intento por sacarlo de su aislamiento, roba su enano de jardín y lo envía en un viaje alrededor del mundo.
Suzanne (interpretada por Clotilde Mollet)
Suzanne es la dueña del café donde Amélie trabaja. Es una figura maternal para Amélie y sus compañeros de trabajo, proporcionando consejos y apoyo.
Hipólito (interpretado por Artus de Penguern)
Es el escritor fracasado que frecuenta el café donde trabaja Amélie. Sus interacciones con los demás personajes añaden un toque de humor y humanidad a la historia.
Georgette (interpretada por Isabelle Nanty)
Es la hipocondríaca tendera del tabaco en el café de Suzanne, quien también experimenta cambios positivos en su vida gracias a las intervenciones de Amélie.
Secundarios
Raphael Poulain
Padre de Amélie, un hombre retraído cuya vida gira en torno a su jardín y el recuerdo de su difunta esposa. Amélie intenta animarlo a explorar el mundo.
Amandine Poulain
Madre de Amélie, fallecida en un extraño accidente cuando Amélie era joven. Su muerte tiene un impacto profundo en la vida y el comportamiento de Amélie.
Raymond Dufayel
Conocido como «El hombre de cristal», es un pintor que vive en el mismo edificio que Amélie y sufre de osteogénesis imperfecta, lo que hace que sus huesos sean extremadamente frágiles. Se convierte en amigo y consejero de Amélie.
Hipólito (el escritor)
Escritor fracasado que también vive en el edificio de Amélie. Sus intentos constantes y fallidos de escribir una novela se convierten en fuente de humor y compasión.
Georgette
Hipocondríaca vendedora de tabaco del café donde trabaja Amélie. Su obsesión con las enfermedades contrasta con su eventual relación con Joseph.
Joseph
El celoso exnovio de una de las compañeras de trabajo de Amélie, que frecuenta el café. Su comportamiento obsesivo y sus celos son una subtrama recurrente.
Gina
Una de las camareras del café, amiga de Amélie. Tiene una relación complicada con su exnovio, Joseph.
Lucien
Joven ayudante en la frutería de la esquina, objeto de abuso constante por parte de su jefe. Amélie le ayuda a ganar confianza en sí mismo.
Collignon
Desagradable dueño de la frutería donde trabaja Lucien. Amélie se venga de él por su maltrato hacia Lucien de manera ingeniosa y cómica.
Madame Suzanne
Dueña del café donde trabaja Amélie. Es una figura maternal para el personal del café y tiene un pasado como artista de circo.
Otros personajes
Madame Collignon
La madre del desagradable Collignon. Aunque su presencia es menor, su relación con su hijo añade otra capa a la dinámica del vecindario.
Philomene
Azafata amiga de Madame Suzanne, que aporta historias y experiencias de sus viajes. Su vida aventurera contrasta con la existencia más estática de los demás personajes.
Bretodeau/El hombre de la caja
Hombre mayor a quien Amélie devuelve una caja de tesoros de la infancia que había olvidado. Este acto de bondad desencadena la misión de Amélie de hacer el bien.
Dominique Bretodeau
Destinatario de la caja de recuerdos que Amélie encuentra en su apartamento y se esfuerza por devolver. El redescubrimiento de la caja le brinda una profunda nostalgia y alegría, y le inspira a reconectar con su hija.
Resumen película Amelie
Amélie Poulain, una joven introvertida que encuentra un propósito en la vida al realizar actos de bondad para las personas que la rodean, mientras permanece en las sombras. Tras descubrir una caja de recuerdos oculta en su apartamento, Amélie decide encontrar a su dueño y devolverla, iniciando así su viaje de intervenciones anónimas destinadas a mejorar las vidas de otros.
Al devolver la caja a su dueño y ver el impacto positivo que tiene en él, Amélie se inspira para continuar haciendo el bien. Ayuda a su padre enviando su enano de jardín alrededor del mundo para animarlo a seguir sus propios sueños de viaje, consuela al «hombre de cristal», un vecino con enfermedad de los huesos de vidrio, mediante videos y compañía, y orquesta el reencuentro de antiguos amantes, entre otras buenas acciones.
Mientras realiza estas buenas obras, Amélie se encuentra con Nino Quincampoix, un joven fascinado por coleccionar fotos desechadas de fotomatones. Amélie se siente atraída por él, pero su timidez y miedo al rechazo la llevan a iniciar un juego del gato y el ratón, dejándole pistas para que él la descubra. A través de este juego, Amélie y Nino comienzan a conocerse, aunque de manera indirecta.
El miedo de Amélie a ser herida emocionalmente casi sabotea su potencial relación con Nino. Sin embargo, con la ayuda de su vecino pintor y los consejos de otros amigos, finalmente se arma de valor para enfrentar sus temores. Amélie finalmente se revela a Nino y, después de algunas complicaciones y malentendidos, ambos se encuentran y reconocen sus sentimientos el uno por el otro.
La película concluye con Amélie y Nino juntos, disfrutando de un paseo en motocicleta por las calles de París, simbolizando el comienzo de su relación y el final del aislamiento emocional de Amélie. A través de su viaje, Amélie aprende que, al igual que ha buscado la felicidad para otros, también merece encontrar su propia felicidad y conexión.
Final extendido
El final de «Amelie» es un momento dulce y satisfactorio que culmina el viaje emocional y personal de Amélie Poulain. Después de una serie de actos desinteresados hacia otros y un juego de pistas con Nino Quincampoix, Amélie finalmente se enfrenta a su miedo al rechazo y decide arriesgarse en el amor.
Cuando Nino, después de seguir las pistas dejadas por Amélie, llega a su apartamento. Amélie, superando su timidez y miedo, lo recibe. Ambos personajes han estado bailando alrededor de sus sentimientos el uno por el otro, comunicándose más a través de gestos y actos indirectos que a través de palabras directas. La tensión de su relación se resuelve en este momento, cuando se encuentran cara a cara y se reconocen mutuamente como los objetos de su afecto.
El final muestra a Amélie y Nino juntos, disfrutando de un momento de felicidad y conexión. Se montan en una moto y se alejan por las calles de París, una escena que simboliza el comienzo de su aventura juntos. Este momento captura la esencia de lo que la película ha estado construyendo: la importancia de la conexión humana, la valentía de seguir el corazón y la búsqueda de la felicidad.
La película cierra con una nota optimista, sugiriendo que Amélie, a través de su viaje para ayudar a otros, finalmente se ha permitido ser vulnerable y abrirse al amor. La última escena es un testimonio de su crecimiento personal y el poder transformador del amor y la bondad en la vida de las personas.
